lunes, 21 de abril de 2008

Programas de Magíster y Doctorado:

La apuesta por lo nacional

Desde el año 2002 hasta ahora, los programas de especialización en Chile han aumentado en casi un 70%. Hoy el mercado laboral valora más a quienes han invertido en su educación, prefiriéndolos al momento de buscar empleo.

Constanza Mujica (30), había terminado la carrera de Periodismo y quería seguir estudiando. Las alternativas dentro de Sudamérica no eran pocas dado el área en que quería especializarse: las telenovelas. Pero tal como ella dice: “no me veía tomando tan abiertamente el riesgo de irme sola cuatro años”, es por eso que decidió, debido a su inclinación por la literatura y por el alto prestigio que tenía, estudiar un Doctorado en Literatura en la Pontificia Universidad Católica de Chile

Como Constanza son muchos los jóvenes que quieren continuar sus estudios después de terminar el pregrado y que, por distintas razones, prefieren no partir de Chile. El año 2007 el número de matriculados en estudios de Magíster y Doctorado dentro del país ascendió a la suma de 17.207 alumnos, cifra mayor en un 70% respecto al año 2002, en el que se registraron 10.163 alumnos inscritos en los programas de posgrado.

Esto se debe a que existe un interés significativo no sólo por parte de los alumnos, sino que además un aumento en la oferta de posgrado. Actualmente existen cerca de 843 programas, lo que revela un alto crecimiento, considerando que en año 2002 sólo existían 588 programas. Para Rosa Devés, Directora del Departamento de Posgrados de la Universidad de Chile, este interés de los alumnos por realizar una especialización se debe a que: “cada vez más la empresa valora los grados académicos y en este caso el Magíster es muy relevante. Por ello existe una creciente oferta de programas de orientación más profesional”.

Según los expertos, los programas de Magíster y Doctorado han ido aumentando porque le permiten a los planteles de estudio obtener mayor visibilidad dentro del mercado de la educación universitaria, encontrarse en una buena posición para competir con otras universidades, obtener nuevos alumnos que serán los clientes de la institución, ganar más recursos para la universidades y, finalmente, para poder posicionar el proyecto de la institución.

Para Mladen Koljatic, Doctor en Educación de la Universidad de Indiana, “el auge por crear nuevos programas va a continuar. La idea de que la formación de un profesional termina con el título de pregrado hace tiempo que no es válida. Hoy el avance del conocimiento y el desarrollo del país hacen necesario continuar perfeccionándose”. Desde el mercado la visión es similar, así lo explica Leslie Cooper, Directora Ejecutiva de HK Human Capital, quien sostiene que los posgrados “en general sirven como factor de diferenciación respecto a otros ejecutivos del mismo nivel. Sin embargo, existen sectores donde son más valorados como el sector financiero”.

El realizar una especialización debiese ser visto como una inversión, pues a medida que la persona obtenga un mayor grado educacional mayor tiende a ser la remuneración que percibe, es así como José Palma, Director de admisión y comunicación de la Universidad de Ciencias de la Información, dice que, “el primer Master, me permitió casi triplicar mis ingresos en menos de 5 años”.

Las razones que llevan a un estudiante a realizar una especialización en Chile se debe a factores: económicos, familiares o laborales. Sin embargo, cursar uno en el país no significa estudiar en desventaja con respecto a otras universidades, ya que según el Academic Ranking of World Universities del Institute of Higher Education existen dos universidades en el país que se destacan por sobre el nivel Latinoamericano: Pontificia Universidad Católica (239) y Universidad de Chile (312). Juan Pablo Swett, Gerente de Trabajando.com, señala que a nivel latinoamericano los posgrados chilenos se encuentran evaluados como de alta exigencia y especialización, además señala que eso explica el por qué muchos de los jóvenes de Centroamérica vienen a Chile a realizar programas de Magíster, situando el prestigio que tienen las universidades de nuestro país como unos de los principales factores de atracción.

Un nuevo aire para tu carrera

Los especialistas aseguran que aquellas personas que desean seguir estudiando son profesionales que comprenden que la única forma de avanzar en sus carreras se basa en especializarse en su área, pues eso les da un prestigio que sus colegas no tienen. Rosa Devés, Directora del Departamento de Posgrados de la Universidad de Chile, asegura que “los alumnos de posgrado son quienes mayoritariamente realizan la investigación en el país, son quienes viven en la frontera del conocimiento y eso es un valor al cual el país no puede renunciar”.

Los expertos no conciben la idea de una persona con estudios universitarios sin una especialización. En general, se estima que el tiempo ideal entre egresar del pregrado y volver a estudiar bordea los 5 años. Para Leslie Cooper de HK Human Capital, “quienes estudian postgrados exigentes y reconocidos son vistos como profesionales que asumen desafíos, esforzados y que buscan ser cada día mejor”.

En la actualidad también existe la posibilidad de realizar estudios de posgrado sin tener experiencia laboral, como una forma de hacer que los profesionales puedan llegar al mercado laboral más preparados. Algunas universidades que ofrecen a sus alumnos dicha oportunidad se encuentran: Universidad Católica, Universidad de Chile y Universidad Andrés Bello. Para Javier Bronfman, Coordinador del programa de Magíster en Economía y Políticas Públicas de la Universidad Adolfo Ibáñez, “un magíster te permite ahondar más en los temas que a ti más te interesan, y tener una calificación mucho mejor que un simple pregrado a la hora de salir al mercado laboral y poder encontrar trabajo”. Según Bronfman, una de las mejores formas de lograr una distinción en el mercado se basa en que los alumnos puedan salir con una experiencia más cercana de la realidad desde la Universidad.

Financiamiento

Si bien muchos de los programas de posgrados ya finalizaron los procesos de inscripción y de becas, aún hay posibilidades para el segundo semestre de este año. También se debe considerar que existen becas especiales para aquellos que optaron por quedarse en Chile. En general son entregadas por instituciones ligadas al Gobierno.

La Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica (Conicyt), entrega todos los años una beca que financia estudios de Doctor y Magíster a aquellas personas que han realizado programas de estudios en Chile. El programa consta de cuatro becas: Doctor, Magíster, Tesis y apoyo para desarrollar la Tesis.

El crédito de la Corporación de Fomento de la Producción (CORFO), cubre hasta UF 3.000, con plazos de pago de entre 4 y 10 años y con un período de gracia de hasta 4 años. A este programa pueden acceder profesionales chilenos o extranjeros con residencia en Chile. El crédito se puede solicitar en cualquier banco que haya suscrito un convenio con CORFO.

Una de las becas más recientes, pero con la que más personas se han visto favorecidas, es la Beca Informe Valech, que se encuentra dentro de los beneficios que fueron otorgados por la ley Nº19.992. La beca cubre todo el arancel del posgrado y para acceder hay que encontrarse dentro de la nómina de las personas reconocidas como familiares directos de las víctimas de Derechos Humanos.

El Ministerio de Planificación (Mideplan) también tiene becas, pero se encuentran dirigidas a personas que sean del sector público y que quieran continuar sus estudios de Magíster y Doctorado. La idea del Mideplan es darle la preferencia a los programas de Doctorado, para que después se realicen investigaciones que ayuden al país.

Para poder optar a cualquier beca, en general, primero debe ser aceptado por alguna de las instituciones que se encuentren visadas ante el Consejo Nacional de Acreditación. Para poder acceder a los programas de Magíster y Doctorado, las universidades piden: tener el grado de Licenciado o Bachiller, poseer una carta de recomendación, rendir una prueba de admisión y una entrevista personal. Todo esto, junto al pago de la postulación.

jueves, 29 de marzo de 2007

¿Por qué vale la pena ver Babel?

Con esta película, se demuestra que las imágenes valen más que las palabras.




Un par de niños usando un rifle, una mujer herida en Marruecos, una nana cuidando a dos pequeños y una joven china sordomuda que necesita urgente ser escuchada. ¿Qué tienen en común?, mucho. En Babel estas cuatro historias unidas por las circunstancias, separadas por los idiomas, muestran en forma paralela que la familia es lo más importante en sus vidas.
En el mundo audiovisual, hay formas de narración con las que se puede ir jugando. En este caso en específico, nos encontramos en una estructura de navegación paralela. La única que nos hace comprender, cómo cuatros historias que podrían no haber tenido nada en común. Forman juntas uno de esos finales en los cuales uno puede decir : ¡Aun puedo confiar en Hollywood!.
En esta película, nada se ha dejado al azar. Cada uno de los movimientos de la cámara algo tiene que decir, por algo los están haciendo. Resulta claro que en un lapso menor a los 5 minutos, pudimos apreciar como nuestras cuatro historias nos daban pistas para entender que estaban entrelazadas.
A mi gusto, esta forma de narrar la película hace espectacular a Babel. No sólo, le da pistas al público para que vaya entendiendo cada uno de los movimientos de los actores, sino que además le otorga ese toque de suspenso que hace efectiva la forma de narrar la historia.

Cuando miro Babel, me doy cuenta los errores que han
cometido las otras historias de Hollywood al no creer que en el cine son las “imágenes las que mandan” y no los textos. La historia que encarna la joven china sordomuda comprueba, que no vale la pena hablar para hacernos entender cuál es su drama. La imagen en que Brad Pitt y su esposa se miran con un toque de desprecio y resentimiento, hace entender por si solo cuáles son sus problemas y solo basta que con pequeñas frases nos hagan entender el por qué de estar juntos en la mitad de la nada
El uso de recursos audiovisuales, tan simples como el policía mirando una fotografía. Que es la misma que minutos atrás le vimos a un hombre que era inculpado por tratar de matar a la mujer en Marruecos. Hacen entender porque el público puede llegar a entender una historia como Babel.
Sin duda la narración de la historia quiebra la concepción normal de emisor-receptor, ya que se espera que el receptor sea tan activo que se transforme en un personaje más de la historia. En películas como Babel, el feedback de la gente es muy importante si ellos pierden en algún minuto el hilo de la narración toda la historia se va a la basura porque es necesario que se entiendan esos pequeños códigos que nos da el director.
En este tipo de estructura narrativa, el papel del receptor es vital ya que es él quien debe ir haciendo del contenido una estructura abierta. Pues sin su presencia la historia sólo sería un devenir de circunstancias que parecen inconexas, pero es ese tipo de no linealidad la que hace que se mantenga la tensión hasta el final de la historia. El espectador esta conciente, que si deja de apreciar un solo detalle de la historia, pierde el hilo conductor que él mismo ha ido construyendo.
He visto muchas películas en mi vida, algunas buenas y otras no tanto. Pocas son de las que puede decir: “Esta quiero ver de nuevo”. Esto me pasa con Babel de no tener muchas expectativas para verla pase a ser una seguidora de su narración, porque contar historias en orden lineal es fácil, lo complicado es hacerlo en paralelo y con cambios en el tiempo en cada una. De tal forma que nadie se pierda en la narración es todo un logro.

Cómo lograr que cuatros diferentes formas de vida se vean como un gran todo, es complicado. Sólo lo puede hacer un buen guión y una narración que lo acompañe, pues es necesario que todos los espectadores vayan siguiendo al director en la “extraña” idea de contarnos cuatro películas a la vez con una misma idea final.
La base de Babel esta en contar a partir de pequeñas historias como se encuentra el mundo en estos momentos y la soledad que pueden vivir cada una de las personas que estamos inmersas en él. Ya que, tal como dije hace unos párrafos atrás con películas como está, me convenzo porque Hollywood gasta millones de dólares al año con tal de hacer por lo menos una película de culto.
Aquí va un link para que veas el trailer de la película:

miércoles, 21 de marzo de 2007

¿Te cuento un secreto?



Soy Paz Crisóstomo y siempre dije que los blogs me parecian que ventilaban nuestra vida privada... Pero aquí estoy, por las cosas de la vida les mostrare un poco de mi en la red.

Tratare de contarte algunas de las cosas que veo en mi vida diaria y de lo divertido que es pasearse por Santiago.

Espero te guste lo que escribo, sino puedes decirmelo...

Saludos